En el pasado mes de junio, nuestra entidad recibió un galardón nacional del que estamos sumamente orgullosas y que nos da más fuerza, si cabe, para afrontar nuestros quehaceres diarios.
Estas son las palabras de nuestra Directora, María José Arranz, enfermera de la promoción 1979 de Vitoria:
«Desde Residencia 3ª Edad Virgen de Begoña queremos compartir con todos ustedes la inmensa alegría y orgullo que sentimos al haber recibido el Premio Nacional de Reputación Enfermera 2024.
Es un honor que este reconocimiento recaiga en nuestra isla y en nuestra capital y que se extienda a los cuatro centros de atención sociosanitaria que conforman nuestro proyecto. Este galardón no solo nos reconoce como institución, sino que también pone en valor el esfuerzo y la entrega de todo nuestro equipo de trabajadoras, que desde nuestra apertura en 1993 nos han acompañado con su dedicación y profesionalidad.
Este premio no habría sido posible sin cada una de ellas. A todas estas mujeres, les damos las GRACIAS por su esfuerzo, compromiso y lealtad durante tantos años.
Nuestro agradecimiento a los 1.145 mayores que se han dejado cuidar, y con los que hemos compartido momentos inolvidables, así como a sus familiares por depositar en nosotras su confianza, al entregarnos el cuidado de sus seres más queridos.
Este galardón simboliza el reconocimiento a una labor donde el cuidado es y seguirá siendo el eje central, nuestra identidad y nuestro propósito desde el primer día.
Cuidar ha sido, y continúa siendo, nuestra vocación más profunda.
Este logro no sería posible sin el compromiso y trabajo de mi compañera y administradora, así como el mío, enfermera y directora de nuestros centros. Nuestra mirada atenta, nuestro acompañamiento al equipo y nuestra dedicación constante al bienestar de nuestros residentes, han hecho posible este reconocimiento.
“Si volviera a nacer, volvería a ser enfermera”. Por eso, seguiré colegiada y no pienso jubilarme aún. Cuidar a nuestros mayores se ha convertido en mi mayor satisfacción y también en mi forma de disfrutar la vida.
Gracias, de corazón, a todas las personas e instituciones que confían cada día en nuestro trabajo y muy especialmente a quienes hacen posible que la excelencia en los cuidados sea una realidad.»